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Un simulacro de emergencia es un ejercicio obligatorio que tiene el objetivo de familiarizar a todos los pasajeros y a la tripulación sobre la ubicación donde se deben reunir si hubiera una situación de una emergencia. Durante este simulacro, se presenta información de seguridad adicional (por ejemplo: instrucciones sobre cómo ponerse un chaleco salvavidas).
Las guías reguladoras del Convention of Safety of Life at Sea (SOLAS) requieren que un simulacro de emergencia sea llevado a cabo en las primeras 24 horas tras la salida de un barco de su puerto de embarque. El simulacro de emergencia para pasajeros en todos los barcos de nuestra flota es impartido de 30 a 60 minutos antes de que el barco zarpe.
Los anuncios del simulacro son en inglés y en el idioma oficial del puerto de salida. También se realizan en otras lenguas siempre que haya un número representativo de personas a bordo cuyo idioma sea ese. En algunos cruceros, las llamadas pueden realizarse en la lengua del lugar de donde sale el barco seguido del inglés y de otras lenguas principales.
Los pasajeros no deberían usar chalecos salvavidas durante el simulacro de emergencia. Nuestros procedimientos ordenan a los pasajeros a dirigirse directamente a los lugares de reunión en el caso de una situación de emergencia y al escuchar la señal de emergencia. Esto reduce las posibilidades de tránsito cruzado y mejora el tiempo de respuesta en los lugares de reunión, ya que los pasajeros no necesitan regresar a sus camarotes para ir a buscar sus chalecos salvavidas si se encuentran en otro lugar del barco en ese momento. Los miembros de la tripulación proveerán chalecos salvavidas a los pasajeros en los lugares de reunión. En el caso de una emergencia, uno de los aspectos más importantes es la responsabilidad de contar todas las personas a bordo, y este proceso facilita esa responsabilidad.
La industria de los cruceros está altamente regulada y la seguridad de nuestros pasajeros es siempre nuestra mayor prioridad.
Todos los cruceros son diseñados y operados en conformidad con los estrictos requerimientos de la Organización Marítima Internacional, la agencia de la ONU que otorga mandatos de estándares globales de seguridad y funcionamiento de cruceros a través de tratados, regulaciones y resoluciones codificadas en el Convention of Safety of Life at Sea (SOLAS).
Las regulaciones y requerimientos relacionados con la seguridad son rigurosos y a menudo cumplimos con creces lo requerido, por ejemplo, llevando provisiones de respaldos mecánicos, náuticos y de seguridad.
La tripulación de nuestras flotas llevan a cabo un extenso entrenamiento, certificación, simulacros y escenarios para prepararse para una emergencia, incluyendo entrenamiento sobre los procedimientos de evacuación de los barcos.
Todos los oficiales de nuestra flota reciben un entrenamiento especializado, y cada tripulante debe participar en módulos de entrenamiento de seguridad para que estén preparados para responder de una manera rápida y efectiva en el improbable caso de una emergencia. Además llevamos a cabo simulacros semanales, mensuales, trimestrales y anuales en toda nuestra flota, para entrenar y prepararnos para responder a una variedad de posibles situaciones. A ello se suma que cada una de nuestras naves está equipada con sistemas avanzados de detección y supresión de fuego, y cada barco tiene a bordo personal altamente entrenado que puede responder eficientemente y controlar estos sistemas.
El número de botes salvavidas varía en cada clase de barco. Toda nuestra flota tiene suficientes botes salvavidas a bordo, además de capacidad adicional de reserva, por requerimientos regulatorios.
El procedimiento de simulacro de emergencia, como parte del Programa de Evacuación Juvenil, asegurará que los niños sean llevados al lugar de reunión, donde se encontrarán con sus padres o tutores. Esto también está mencionado en el anuncio general de simulacro de emergencia.
Durante el proceso de simulacro, la tripulación entrenada ataviada con chalecos reflectantes estará distribuida por todo el barco para ayudar a pasajeros con discapacidades. Además del personal designado, hay equipos de tripulantes especialmente entrenados para ayudar a pasajeros con necesidades especiales.
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